Convertir la complejidad en claridad
Nos asociamos con una empresa de software logístico que luchaba por destacar. Su contenido era técnico y sin vida: un gran producto, pero sin chispa. ¿Nuestro primer paso? Reposicionar su mensaje. Abandonamos la jerga y contamos historias cercanas, pasando de “software de optimización de transporte” a “hacer desaparecer los dolores de cabeza del transporte”. La diferencia fue inmediata: el compromiso en LinkedIn empezó a aumentar.
“En el momento en que dejamos de hablar de características y empezamos a contar historias, la gente nos escuchó”.”
Hacer que el B2B sea divertido (sí, de verdad)
Lanzamos la serie de contenidos #ShippingFails: percances reales, consejos de expertos y humor. Dio en el clavo. Los mensajes se compartían, se reían y, lo más importante, se recordaban. Reutilizamos las mejores publicaciones en carruseles de LinkedIn, vídeos cortos y contenido de blog útil y entretenido. Un post consiguió más de 40.000 impresiones orgánicas.
De las opiniones al valor
Para impulsar los resultados, añadimos CTA potentes -listas de comprobación, seminarios web, invitaciones a demostraciones- para garantizar que el contenido viral condujera a conversiones reales. ¿El resultado? El doble de clientes potenciales y una marca que pasó de ser invisible a convertirse en la favorita del sector.
